La estructura del bastidor está formada por una viga de celosía de cuatro cordones soldada a partir de secciones huecas redondas. La estructura de soporte es necesaria porque la cubierta de membrana no debe estar conectada al edificio existente. La desmontabilidad requerida de la estructura se consigue dividiéndola en 10 secciones de vigas de una longitud máxima de 12 m. Para conseguir una clasificación de resistencia al fuego de F30 sin revestimiento de protección contra el fuego, se llevó a cabo un "diseño en caliente" de la estructura. En este procedimiento, se utilizó una resistencia residual significativamente reducida del 28 % del valor inicial debido al efecto del calor. En combinación con medidas constructivas para minimizar las tensiones de restricción debidas a la expansión térmica, el método demuestra ser un procedimiento económico para el dimensionamiento de perfiles.